ELEFANTE BLANCO. Dirección: Pablo Trapero. Guión: Pablo Trapero, Martín Mauregui, Alejandro Fadel, Santiago Mitre. Fotografía: Guillemro Nieto. Música: Michael Nyman. Intérpretes: Ricardo Darín, Jéremie Renier, Martina Gusman, Federico Benjamín Barga, Mauricio Minetti, Walter Jakob.
En muchas de las películas del cineasta argentino Pablo Trapero se desprende una clara denuncia social. Así, si en "Leonera" retrataba el mundo carcelario y en "Carancho" los fraudes de los accidentes de tráfico, ahora toda su carga reivindicativa se centra en las llamadas "villas miseria", áreas de chabolas de la ciudad de Buenos Aires. El "elefante blanco" del título es un inmenso hospital cuya construcción nunca se llegó a terminar y alrededor del cual ha crecido una de estas villas bonaerenses. Una inmensa y abandonada mole de cemento que sirve de metáfora para hacer hincapié en el olvido hacia un importante sector de la sociedad. La pobreza, la violencia, las drogas y el abandono de las autoridades son los principales componentes de una realidad cruda y espeluznante que Pablo Trapero muestra de manera magnífica, sin trucos ni manipulaciones. En medio de este ambiente hostil, un grupo de sacerdotes y una trabajadora social se entregan día a día en una titánica e idealista lucha por mejorar las condiciones del lugar.
Destaca, en primer lugar, la labor de sus sobresalientes intérpretes: tanto Martina Gusman como el belga Jéremie Renier, acompañan perfectamente a un actor que ya es un aliciente en sí mismo para cualquier película que tenga el honor de contar con él: Ricardo Darín.
En su primera mitad, el retrato de la atmósfera que envuelve a los protagonistas y el ritmo vibrante de las diferentes tramas que se desarrollan enganchan rápidamente al espectador. La película cuenta con escenas geniales como el impactante plano secuencia de Jeremie Renier en busca del cuerpo de un chaval o el escalofriante tiroteo que pilla desprevenidos a los protagonistas. Sin embargo, en su tramo final, la película no es capaz de concluir todas las puertas abiertas en su inicio. Puede que no entrara en sus pretensiones y que haya aspectos que queden intencionadamente abiertos, pero algunos detalles resultan precipitados y resueltos de manera aparatosa. No sé si tendrá que ver que hasta cuatro guionistas hayan metido mano en el proyecto. De todas maneras, aunque el desenlace sea acertado y consecuente, queda la sensación de desequilibrio entre su magistral primera mitad y la segunda, menos convincente. A pesar de ello, una buena y recomendable película.
CALIFICACIÓN: 7
La curiosidad: Pablo Trapero, la denuncia más allá de las pantallas.
Pablo Trapero y su pareja, la actriz Martina Gusman
(elespectador.com)
El tremendo éxito de "Elefante blanco" en Argentina ha hecho que sea declarada "bien de interés cultural y social" a petición de una diputada bonaerense. Su impacto ha propiciado el aumento de la presencia policial en la villa y un gesto de acercamiento por parte de algunos políticos. Quizás lo más beneficioso ha sido que desde su estreno, se hayan instalado diversas unidades móviles de atención sanitaria y se haya procedido al inicio de un censo real de la zona.
No es la primera vez que una película de Trapero revoluciona la sociedad argentina: con "Leonera" en 2008 se consiguió aprobar una ley que estableciera la prisión domiciliaria para aquellas madres que eran condenadas. Probablemente, el caso más sonado sea el de la película "Carancho" en 2010, cuya polémica desencadenó una ley llamada como la misma película "La ley Anti-Carancho". Dicha ley, protege a las víctimas del abuso de los abogados. Por su parte, "El bonaerense", una de las primeras películas de Pablo Trapero, se proyecta en todas las escuelas de policía de Argentina ya que trata el tema de la corrupción policial. Sin duda, Trapero ha conseguido elevar el cine social a su máxima expresión, trascendiendo en la sociedad y provocando cambios en la misma. ¿Cuál será su siguiente incursión?
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