X-MEN: DÍAS DEL FUTURO PASADO. Dirección: Bryan Singer. Guión: Simon Kinberg, Matthew Vaughn y Jane Goldman. Música: John Ottman. Fotografía: Newton Thomas Sigel. Intérpretes: Hugh Jackman, James McAvoy, Michael Fassbender, Jennifer Lawrence, Nicholas Hoult, Ian McKellen, Patrick Stewart, Peter Dinklage, Ellen Page, Omar Sy, Halle Berry.
Bryan Singer fue el primer director encargado de llevar a la gran pantalla a los X-Men y desempeñó su labor durante las dos primeras entregas. Aquella trilogía se cerró en 2006 con "X-Men: la decisión final", dirigida por Bret Ratner y no fue hasta 2011 cuando estos personajes de Marvel tuvieron un relanzamiento cinematográfico con el inicio de una nueva trilogía en "X-Men: primera generación". Esta segunda fase supuso también una mejor acogida de crítica y público, un pabellón bastante alto que ha intentado igualar el director que se dio a conocer con la aclamada "Sospechosos habituales".
Así pues, Singer se ha reencontrado con Lobezno, Tormenta, Magneto y demás personajes que pululan alrededor del profesor Xavier, para contarnos una entretenida historia en la que los viajes en el tiempo serán la clave para que los mutantes y el resto de la humanidad eviten una destrucción casi segura.
La mayoría de blockbusters corren el riesgo de poner todo el empeño en la espectacularidad visual, olvidando, en ocasiones, revisar un poco más los cimientos de toda película: el guión. Afortunadamente, en "X-men: días del futuro pasado" este aspecto esta resuelto decentemente, y la verdad es que se agradece. No es que sea el colmo de la originalidad, ya que el recurso de los viajes en el tiempo y sus daños colaterales pueden resultar previsibles o ya vistos, pero tanto el argumento como sus situaciones están mínimamente elaboradas. Sin ánimo de parecer demasiado exigente o quisquilloso, eché en falta en su tramo central un poco menos de palabrería y más escenas de riesgo o acción. Si es que parece imposible que una película encuentre el equilibrio entre el entretenimiento del espectáculo y la solidez de su guión... Aún así, esta quinta película de los X-Men se acerca bastante.
Por lo demás, la película cuenta con un estupendo elenco de estrellas que supone un aliciente más al atractivo de la película e indudables momentos de derroche de efectos visuales. Destaca especialmente todo el tramo que transcurre en el Pentágono. En general, un buen entretenimiento palomitero.
CALIFICACIÓN: 6-7