THE GRAND BUDAPEST HOTEL. Dirección: Wes Anderson. Guión: Wes Anderson. Fotografía: Robert D. Yeoman. Música: Alexandre Desplat. Intérpretes: Ralph Fiennes, Tony Revolori, Jude Law, Saoirse Ronan, Edward Norton, Jeff Goldblum, Adrien Brody, F. Murray Abraham, Bill Murray, Willem Dafoe, Tilda Swinton, Harvey Keitel, Tom Wilkinson, Mathieu Amalric, Owen Wilson, Jason Swartzman, Bob Balaban, Léa Seydoux.
Después de los buenos resultados de "Moonrise kingdom", el director Wes Anderson ha concentrado en su último film toda la esencia que define su cine, creando una obra personal y un auténtico y genuino ejercicio de estilo. El pasado festival de Berlin ha reconocido este logro otorgándole el Gran premio del Jurado.
No hay ningún detalle en "El Gran Hotel Budapest" que no esté cuidado al máximo y todo ello se traduce en un sinfín de virtudes: en primer lugar, sus impresionantes escenarios y decorados donde hay todo un despliegue de recursos, colorismo y mucha imaginación. A este aspecto le sumamos el habitual gusto del director por los encuadres más estéticos y originales... Sus planos cenitales son ya una marca de la casa.
Por otra parte, el ritmo que Anderson imprime a esta historia de enredos, robos y herencias, deja poco espacio al aburrimiento y recuerda al cine cómico mudo de los años 20. En este caso, el acompañamiento musical del genial Alexandre Desplat (este blog nunca se cansará de alabarle) se adapta a la película como anillo al dedo. Finalmente, "El Gran Hotel Budapest" cuenta con un reparto espectacular: capitaneados por un genial Ralph Fiennes y el desconocido pero muy divertido Tony Revolori, todo un elenco de lujo va apareciendo por la película en breves pero magníficas aportaciones.
Ralph Fiennes y Tony Revolori
Sin embargo, y a pesar de que todo funciona a la perfección y no pongo en duda lo bien orquestado que está todo el film, hay algo que no me termina de llegar como espectador. Desde el punto de vista más personal, me cuesta entrar en estas historias tan rocambolescas y entregarme a esta alocada diversión que juega a rozar la línea del disparate... Y eso que sabía de antemano con lo que me iba a encontrar. Del mismo modo y siendo consciente de la diversidad de público que se puede concentrar en una sala, admito que "El Gran Hotel Budapest" tiene capacidad para divertir y lo hace con imaginación y fantásticos intérpretes... Yo me quedo con su increíble envoltorio visual.
CALIFICACIÓN: 7
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